Beneficios del ejercicio para dejar de fumar
Las pruebas médicas que demuestran que fumar es terrible para la salud están muy bien documentadas, pero todo el mundo sabe que fumar es malo. Este artículo trata de los beneficios de dejar de fumar y de cómo los cambios fisiológicos resultantes pueden mejorar en gran medida su estado físico.
Dejar de fumar tiene un número importante de beneficios en cuanto a la mejora de la salud y la forma física, algunos de ellos son inmediatos y otros a largo plazo. Mucha gente asume que estas mejoras sólo afectan a los atletas de resistencia y a las personas centradas en el ejercicio cardiovascular. Sin duda, no es el caso. El aumento de la función cardiovascular y de los niveles de energía que verás como resultado de dejar de fumar ayudará a aquellos que buscan aumentar su fuerza, resistencia muscular y estado físico general. Veamos algunos de los beneficios fisiológicos:
Después de 48 horas – El monóxido de carbono en la sangre ha desaparecido y los cilios empiezan a trabajar de nuevo para eliminar los restos de tabaco y la mucosidad, es entonces cuando puede empezar la tos. También puede notar que su gusto y su olfato mejoran.
Cuándo es más fácil correr después de dejar de fumar
Según los CDC, aproximadamente una de cada cinco muertes en Estados Unidos es consecuencia de las repercusiones que tiene para la salud el hecho de fumar cigarrillos. Fumar hace que se disparen las posibilidades de que una persona desarrolle una larga lista de cánceres diversos. Impide la circulación y aumenta las posibilidades de padecer enfermedades cardíacas. Además, es un hábito muy caro, amarillea los dientes y hace que la persona huela fatal.
No hay duda de que fumar es un hábito desagradable, y es muy poco probable que no lo sepas ya. Tener ese conocimiento no hace necesariamente más fácil dejar el hábito. Hay muchos trucos, consejos y artimañas para ayudar a una persona a dejar de fumar, pero el que tiene más ventajas para la salud (no sólo la ausencia de riesgos para la salud) es el ejercicio.
Numerosos estudios han demostrado que hacer ejercicio mientras se intenta dejar de fumar puede reducir la sensación de abstinencia que conlleva esta tarea a veces desagradable. Asegúrese de empezar despacio, especialmente si es la primera vez que hace ejercicio, y escuche a su cuerpo.
Beneficios de dejar de fumar
Sí, sólo con hacer ejercicio puede reducir los síntomas de abstinencia, como el estrés, la irritabilidad y la falta de concentración, de forma inmediata y hasta 30 minutos. Y todo lo que tienes que hacer es probar el ejercicio que te gusta: ¡la elección es tuya!
Unos meses después de dejar de fumar, es probable que notes todo tipo de cambios positivos, como una reducción de la tos y las sibilancias, y una mejora de la respiración. También se reducirá el riesgo de contraer infecciones respiratorias como la bronquitis.
¡Lo que te guste! Lo mejor del ejercicio es que puedes elegir cualquier tipo de actividad física con la que te sientas cómodo. Esperemos que esto haga que la perspectiva de hacer ejercicio después de haber dejado de fumar sea un poco menos desalentadora.
1. El ejercicio libera sustancias químicas naturales para sentirse bien en el cerebro2. Hacer ejercicio puede ser una buena distracción de las ansias de fumar3. Realizar una actividad regular puede ayudarle a cambiar sus antiguas rutinas de fumar, por ejemplo, después de cenar puede pasear al perro en lugar de fumar4. La actividad física puede ayudar a reducir los síntomas de abstinencia y las ansias de fumar5. El ejercicio no tiene por qué ser caro, ¡y puede ser divertido!
Ejercicios de respiración después de dejar de fumar
Sí, sólo con hacer ejercicio podrá reducir los síntomas de abstinencia, como el estrés, la irritabilidad y la falta de concentración, de forma inmediata y hasta 30 minutos. Y todo lo que tiene que hacer es probar el ejercicio que le guste: ¡la elección es suya!
Unos meses después de dejar de fumar, es probable que notes todo tipo de cambios positivos, como una reducción de la tos y las sibilancias, y una mejora de la respiración. También se reducirá el riesgo de contraer infecciones respiratorias como la bronquitis.
¡Lo que te guste! Lo mejor del ejercicio es que puedes elegir cualquier tipo de actividad física con la que te sientas cómodo. Esperemos que esto haga que la perspectiva de hacer ejercicio después de haber dejado de fumar sea un poco menos desalentadora.
1. El ejercicio libera sustancias químicas naturales para sentirse bien en el cerebro2. Hacer ejercicio puede ser una buena distracción de las ansias de fumar3. Realizar una actividad regular puede ayudarle a cambiar sus antiguas rutinas de fumar, por ejemplo, después de cenar puede pasear al perro en lugar de fumar4. La actividad física puede ayudar a reducir los síntomas de abstinencia y las ansias de fumar5. El ejercicio no tiene por qué ser caro, ¡y puede ser divertido!