¿Qué es el arte para Deleuze?

Episodio 125 Deleuze pt. 1 – ¿Qué es la filosofía?

Cuando dos iconoclastas del siglo XX -uno artista y otro filósofo- se encuentran, sucede lo que dice Francis Bacon, de Gilles Deleuze: La lógica de la sensación (1981). Cuando Francis Bacon (1909-92), creador de algunas de las imágenes más inquietantes del arte del siglo XX, declara que “creo en el caos profundamente ordenado”, no es de extrañar que le escuche Gilles Deleuze (1925-95), que ve no sólo en el arte sino también en la filosofía un medio para enfrentarse al caos. Para Deleuze, “sería un error pensar que el pintor trabaja sobre una superficie blanca y virgen. Toda la superficie está ya prácticamente investida de todo tipo de clichés, con los que el pintor tendrá que romper”. ¿Cuáles son esos clichés? ¿Y cómo rompe Bacon con ellos sin caer en el caos?

En este curso, rastrearemos estas cuestiones a través de una lectura rigurosa del Francis Bacon de Deleuze. Deleuze no es un crítico de arte. Se enfrenta a Bacon no a través de una valoración estética, sino creando una serie de conceptos filosóficos que permiten una nueva forma de pensar la pintura occidental a través de Bacon. Armados con estos conceptos, reimaginaremos la historia de la pintura desde el arte figurativo del siglo XIX hasta los movimientos de vanguardia como el impresionismo, la pintura abstracta, el expresionismo abstracto y, finalmente, el “figural” de Deleuze ejemplificado por Bacon. A lo largo del curso, no sólo nos familiarizaremos con la pintura moderna, sino que también desarrollaremos nuevos métodos de pensamiento a través de la pintura.

Rizomas, por qué los artistas y activistas deben preocuparse por

Gilles Deleuze [1925-1995] fue más que un profesor universitario que leyó mucho y escribió relativamente poco. Fue un filósofo que, al final de su vida, se preguntó: ¿qué es la filosofía? ¿En qué se diferencia del arte y de la ciencia? ¿Es un arte por derecho propio que inventa conceptos?

Rizomática, nomadología, máquina de los deseos, vida no orgánica, desterritorialización, “agencement” [ensamblaje] son términos acuñados por Deleuze. ¿O acaso provienen de su amigo Félix Guattari [1930-1992], coautor de sus obras clave?

Es sorprendente lo mucho que asimiló y lo preciso que fue en el proceso: matemáticas, pop, psicoanálisis, cine, música electrónica… Los que ponen sus esperanzas en la amistad también se ven como adversarios: anti Edipo, anti Hegel, anti Wittgenstein… Deleuze tiene una forma seductora de filosofar, está a caballo entre la ciencia, la universidad y el estilo académico. Simpatiza con las artes y, al mismo tiempo, hace un gran esfuerzo por renovar la filosofía y liberarla del poder de las opiniones, las proposiciones y las funciones.

Deleuze & Guattari (pt.1) – Mil Mesetas ([email protected])

El objeto no debe, pues, ser en absoluto idéntico, sino desgarrado en una diferencia en la que la identidad del objeto visto por un sujeto que ve se desvanece. La diferencia debe convertirse en el elemento, en la unidad última; por lo tanto, debe remitir a otras diferencias que nunca lo identifican sino que lo diferencian. Cada término de una serie, siendo ya una diferencia, debe ponerse en relación variable con otros términos, constituyendo así otras series desprovistas de centro y convergencia. La divergencia y el descentramiento deben afirmarse en la propia serie. Cada objeto, cada cosa, debe ver su propia identidad tragada en la diferencia, no siendo cada uno más que una diferencia entre diferencias. La diferencia debe mostrarse diferente. Sabemos que el arte moderno tiende a realizar estas condiciones: en este sentido se convierte en un verdadero teatro de metamorfosis y permutaciones. Un teatro en el que nada está fijado, un laberinto sin hilo (Ariadna se ha colgado). La obra de arte abandona el dominio de la representación para convertirse en “experiencia”, empirismo trascendental o ciencia de lo sensible.

El diagrama y el azar manipulado en la pintura

Una parte importante de la obra de Deleuze está dedicada a la lectura de otros filósofos: los estoicos, Leibniz, Hume, Kant, Nietzsche y Bergson, con especial influencia de Spinoza[14]. A. W. Moore, citando los criterios de Bernard Williams para un gran pensador, sitúa a Deleuze entre los “más grandes filósofos”[15]. [Aunque en una ocasión se definió a sí mismo como un “metafísico puro”,[16] su obra ha influido en diversas disciplinas de las humanidades, como la filosofía, el arte y la teoría literaria, así como en movimientos como el postestructuralismo y el postmodernismo[17].

En 1969, fue nombrado profesor de la Universidad de París VIII en Vincennes/St. Denis, una escuela experimental organizada para aplicar la reforma educativa. Esta nueva universidad atrajo a varios académicos de renombre, entre ellos Foucault (que sugirió la contratación de Deleuze) y el psicoanalista Félix Guattari. Deleuze enseñó en París VIII hasta su jubilación en 1987.

La perspectiva vital de Deleuze simpatizaba con las ideas trascendentales, la ética de la “naturaleza como dios” y la experiencia monista. Algunas de las ideas importantes que defendió y en las que se inspiró son su expresión personal pluralismo = monismo, así como los conceptos de Ser y Univocidad. Sus pensamientos fueron moldeados por las inclinaciones de Spinoza; para Deleuze, Spinoza era el “príncipe” o incluso el “Cristo” de los filósofos[21][22][23][24].

¿Qué es el arte para Deleuze?
Scroll hacia arriba